Me gusta la cocina, y me gustan los libros. Así que hoy, día del libro, he querido hacer una entrada de libro. Hay miles de libros de cocina, en la tuya, y en la mía. Pero hay uno que no duerme con todos ellos, uno que aunque tiene recetas, habla del placer y la gastronomía, y que está entre mis favoritos: Afrodita, de Isabel Allende.
Y he querido celebrar este día haciendo una receta de las que le gustan a mi chico. Es un plato muy fácil de preparar, y te aseguro éxito tanto si es para una comida de pareja como si quieres sorprender a tus invitados. Imposible equivocarse.
Ingredientes para 2 personas
- 4 medallones de solomillo de novillo
- 1 cebolla mediana
- 2 puñados de setas o champiñones
- 4 medallones de queso de cabra con finas hierbas
- Sal, Pimienta, Aceite, Vinagre, Azúcar, Miel
Preparación
Picamos la cebolla y la ponemos a pochar en un cazo con un poco de aceite. Cuando empiece a ablandarse, echamos unas 4 cucharadas soperas de azúcar, medio vaso de agua, y un chorro de vinagre. Dejamos reducir a fuego lento, y casi cuando el agua se haya consumido, incorporamos una cucharada sopera de miel.
Salpimentamos los solomillos y preparamos en una plancha bien caliente al punto deseado.
Los medallones de queso de cabra los pondremos directamente en una sartén. Cortarlos recién sacados de la nevera para que no se nos partan. Retirar con una paleta intentando que no se rompan.
En otra sartén, habremos hecho un crujiente de setas o champiñones en aceite bien caliente.
Para servir, preparamos una base con la cebolla caramelizada con miel, sobre la que colocaremos los solomillos, una rodaja de queso de cabra sobre cada uno de ellos, y sobre el queso de cabra, el crujiente de setas.
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